En un comunicado conjunto, ambas compañías han anunciado la creación de una nueva ‘joint venture‘, con cada una de ellas poseyendo el 50% de participación y los mismos derechos de gobernanza. Se espera que esta nueva empresa genere sinergias de alrededor de 490 millones de euros anuales a partir del cuarto año después del cierre de la operación.
Las cuentas preliminares revelan ingresos aproximados de 4.400 millones de euros para Orange y alrededor de 1.650 millones de euros para los accionistas de MásMóvil. La nueva empresa operará como una sola entidad, con las cuentas consolidadas en una nueva entidad legal ya registrada, y se espera que esté operativa desde hoy.
La fusión, valorada en unos 18.600 millones de euros, crea un nuevo líder en el mercado español de las telecomunicaciones, con alrededor de 37 millones de clientes de banda ancha y móvil. El nuevo consejo de administración estará liderado por Meinrad Spenger como consejero delegado y Ludovic Pech como director financiero.
Según Christel Heydeman, consejera delegada del grupo Orange, esta ‘joint venture‘ impulsará la innovación y la inversión en banda ancha de alta velocidad y servicios digitales en España. Por su parte, Spenger ha destacado la responsabilidad de servir a más de 30 millones de clientes en el país y ha expresado su compromiso con la satisfacción del cliente y la innovación.
La sede operativa de la nueva empresa se ubicará en las instalaciones de Orange en Pozuelo de Alarcón (Madrid), debido a la capacidad limitada de las instalaciones de MásMóvil en Alcobendas para albergar a todos los empleados después de la fusión.
El Gobierno autorizó la fusión con la condición de un plan industrial ambicioso y políticas de inversión potentes para los próximos años, así como compromisos de mantenimiento del empleo suficientes.