- La actriz gaditana se enfrenta en solitario a un texto escrito a su medida sobre los juguetes rotos de la sociedad actual.
- La obra, escrita por Iborra y Sonia Gómez, estará en el Teatro Salón Cervantes los días 24 y 25 de agosto.
La actriz, humorista y cantante gaditana Pepa Rus (Chiclana de la Frontera, 1985) protagoniza el monólogo cómico ¡Viva la Pepa!, dirigido por Juan Luis Iborra, escrito por él mismo junto a Sonia Gómez y coproducido por Pentación Espectáculos, Deleite Producciones y Juan Luis Iborra.
No es la primera vez que Rus e Iborra trabajan juntos. En 2010 la actriz se puso a las órdenes del director por primera vez en Historias de un karaoke y, posteriormente, en 2017, en Un chico de revista, ambas obras producción de Pentación.
El multipremiado y prolífico director explica cómo nació esta tercera colaboración entre los dos: “Pepa había visto Gibraltareña (con Elisa Matilla) y me dijo que le escribiera algo así. Así que me puse a escribir y, cuando llevaba 5 hojas y se las di y le dije: si te gusta esto, sigo. Y le gustó. Quería escribir una comedia, pero con mucho sentimiento y mucho pellizco de corazón, y me salió este personaje tan bonito con el que Pepa está que se sale, porque cuando escribes un traje a medida se nota mucho”.
El título le vino enseguida (“sin él no sé escribir, porque me marca una guía”), asegura Iborra, que considera ¡Viva la Pepa! una obra “sobre la libertad de poder llegar a ser quien quieras, y sobre los juguetes rotos de la sociedad actual”. Por supuesto, en un país en el que las elecciones “no acaban nunca”, la función es también una crítica “a la política que se hace actualmente, por lo que siempre va a estar de moda”, añade.
“Me apasionó el texto en cuanto lo leí porque, contra todo pronóstico, una buena mujer llega a la política”, asegura por su parte Pepa Rus, que explica que, aunque el azar cambia la vida de esta persona al principio parece que para bien, “se va viendo que acaba por ser un poco juguete roto”. Aunque el apoyo de Juan Luis Iborra y su texto “es muy importante”, para la actriz gaditana supone “un vértigo muy grande estar sola por primera vez en el escenario y tener que mantener la atención del espectador durante los 70 minutos que dura la función”.
Tanto para la actriz como para el director este es el momento perfecto para hacer ¡Viva la Pepa! porque, “con todo lo que está pasando en todos los niveles del escalafón público institucional, es interesante ver lo que le pasa a una buena persona cuando llega a la política”.