A lo mejor algunos de ustedes recuerdan la campaña presidencial estadounidense de 1988 en la que se enfrentaban el vicepresidente George Bush padre al demócrata Michael Dukakis. Al jefe de campaña de Dukakis le pareció buena idea sacar un video de su candidato asomado a la escotilla de un tanque lanzado a toda velocidad por un descampado. Al pobre hombre le pusieron un casco de tanquista demasiado grande que, con cada bache, se le caía encima de los ojos. No se sabe si esa imagen fue la causante de su derrota electoral, pero desde luego el espantoso ridículo no le ayudó nada.
Me pregunto si el director de aquella desastrosa campaña electoral es el mismo gilipuertas que el que nos acaba de parir el Verano Azul del PP, en la que un tal Borja Semper, con aspecto de dirigirse a un partido de pádel, nos intenta pasar no se sabe muy bien qué mensaje desde la playa de Cortylandia.
Vamos a ver si te entiendo bien, Borjita, ¿Me estás diciendo que esto es una excursión? ¿Me estas diciendo que esto ya está ganado? Porque si es el caso yo no me vuelvo a Madrid el 23J a votar.
O a lo mejor me estas diciendo, Borjita, que el PP es una pandilla de veraneantes. Pues entonces tampoco me vuelvo a votar, porque si mi elección es entre los maleantes que tenemos ahora y una cuadrilla de lerdos que se dirigen a la playa silbando, pues la verdad es que el que se queda en la playa soy yo.
A ver, Borjita, yo quiero un presidente, no quiero a Chanquete. Yo quiero un gobierno serio, no quiero una pandilla que se pasea en bicicleta con la merienda en una cesta. Yo quiero unos gestores capaces, no unos veraneantes.
Y sobre todo, lo que quiero es un jefe con criterio, autoridad y carácter, cosa que estoy empezando a echar de menos. No conozco a Feijóo más que de algún debate y un par de entrevistas. Hasta ahora me parecía un tipo sólido, pero su gestión de los pactos locales con Vox me está dejando, digamos, acalorado. Necesitado de un buen chapuzón. Que el PP pacte con Vox será una buena idea o no. Según y cómo. Lo que es una pésima idea es que no exista un criterio unificado y que cada miembro del PP ande por allí tomando decisiones diferentes y dando las explicaciones que a cada uno se le ocurre según donde y cuando. Lo que veo, en vez de un equipo coordinado con ideas claras y bien defendidas, es una pandilla de críos chillando cada uno una cosa mientras corren a saludar a Chanquete.
El Gobierno de Sánchez es una maldición para nuestro país y parece que existe la posibilidad de botarlo este verano, pero si Borja Semper y su director de campaña Disney se imaginan que lo vamos a echar con unas palas y una pelota, se equivoca gravemente. La estupidez y la arrogancia son malas consejeras. ¿O es que hace falta recordarle la llegada de Zapatero?
Necesitamos un presidente que tenga criterio, que se explique clara y convincentemente, que sepa negociar con personalidad y que tenga la autoridad necesaria para controlar a un equipo de gobierno serio y sólido.
Repito, entre la banda de manguis que tenemos ahora y una pandilla de tontainas yo no interrumpo mis vacaciones. Porque para tener a Chanquete, ya tengo a Seven y a Lola que son mucho más monos y además no hablan. Y, Borjita, ponte una chaqueta, anda, que no estás en la Concha.
El Circo Continúa…
José Luis Vilallonga
@JoseVilallonga