El crimen queda totalmente esclarecido con la detención e ingreso en prisión de los autores materiales del crimen, dos hermanos compatriotas de la víctima. Uno de ellos fue detenido el pasado mes de septiembre mientras que el otro hermano huyó a Rumanía días después de cometer el homicidio. La colaboración policial internacional a través de Interpol, la Agregaduría de Interior en la Embajada Española en Rumanía y el Servicio de Investigación Criminal de la Policía Rumana ha resultado fundamental para el último arresto.